EL REINO DE DIOS EN LA TIERRA
La Paz del Señor sea con todos Vosotros:
1. El Reino de Jehová se establecerá en la tierra en los próximos años
Porque de Jehová es el reino; Y él se enseñoreará de las gentes (Salmos 22:28). Para notificar a los hijos de los hombre sus valentías, Y la gloria de la magnificencia de su reino. Tu reino es reino de todos los siglos, Y tu señorío en toda generación y generación (Salmos 145:12,13).
2. La Restauración del Reino de Dios
Dios restaurará su Reino en el Occidente y no en el Oriente.
Cristo anunció que su reino no es de este Mundo. Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo: si de este mundo fuera mi reino, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los Judíos: ahora, pues, mi reino no es de aquí (Juan 18:36).
El Reino de Dios fue quitado de Medio Oriente. Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que haga los frutos de él (Mateo 24:23). Por tanto, oíd palabra de Jehová, todo Judá que habitáis en tierra de Egipto: He aquí he jurado por mi grande nombre, dice Jehová, que mi nombre no será más invocado en toda la tierra de Egipto por boca de ningún hombre Judío, diciendo: Vive el Señor Jehová (Jeremías 44:26).
Cristo anuncia el Reino de Dios en la tierra. Entonces los que se habían juntado le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restituirás el reino a Israel en este tiempo?. Y les dijo: No toca a vosotros saber los tiempos o las sazones que el Padre puso en su sola potestad (Hechos 1:6,7).
El Reino de Dios se establecerá, según el plan divino. Al cual de cierto es menester que el cielo tenga hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde el siglo (Hechos 3:21).
El Pueblo de Dios estará sin Rey por mucho tiempo. Muchos días ha estado Israel sin verdadero Dios y sin sacerdote, y sin enseñador y sin ley (2 Crónicas 15:3). Porque muchos días estarán los hijos de Israel sin rey, y sin príncipe, y sin sacrificio, y sin estatua, y sin ephod, y sin teraphim (Oseas 3:4).
3. El Reino de Dios a establecerse en la Tierra
Ningún hombre, nación o grupo de naciones, podrá solucionar el Problema del Mundo y lo que reina en este planeta es la ciencia del mal, conocimiento diabólico (Santiago 3:15).
Y en los días de estos reyes, levantará el Dios del cielo un reino que nunca jamás se corromperá: y no será dejado a otro pueblo este reino; el cual desmenuzará y consumirá todos estos reinos, y él permanecerá para siempre (Daniel 2:44).
Ellos hicieron reyes, mas no por mí; constituyeron príncipes, mas yo no lo supe: de su plata y de su oro hicieron ídolos para sí, para ser talados (Oseas 8:4).
Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra (Mateo 6:10). Y preguntado por los Fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia; Ni dirán: Helo aquí, o helo allí: porque he aquí el reino de Dios entre vosotros está (Lucas 17:20,21). Yo pues os ordeno un reino, como mi Padre me lo ordenó a mí (Lucas 22:29).
4. El Reino de Dios será entregado al más bajo de los hombres
El Reino es dado al más bajo de los hombres. La sentencia es por decreto de los vigilantes, y por dicho de los santos la demanda: para que conozcan los vivientes que el Altísimo se enseñorea del reino de los hombres, y que a quien él quiere lo da, y constituye sobre él al más bajo de los hombres (Daniel 4:17).
Escogido de entre los hombres. Sin duda pondrás por rey sobre ti al que Jehová tu Dios escogiere: de entre tus hermanos pondrás rey sobre ti: no podrás poner sobre ti hombre extranjero, que no sea tu hermano (Deuteronomio 17:15).
Para gobernar en Justicia. He aquí que vienen los días, dice Jehová, y despertaré a David renuevo justo, y reinará Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra (Jeremías 23:5). He aquí que en justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio (Isaías 32:1). He aquí, que yo lo di por testigo a los pueblos, por jefe y por maestro a las naciones (Isaías 55:4). Cuando los justos dominan, el pueblo se alegra: Mas cuando domina el impío, el pueblo gime (Proverbios 29:2).
El Reino de Dios viene en el Hijo del Hombre. De cierto os digo: hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan visto al Hijo del hombre viniendo en su reino (Mateo 16:28).
¿Quién es el Rey?. Ezequiel pues os será por señal; según todas las cosas que él hizo, haréis: en viniendo esto, entonces sabréis que yo soy el Señor Jehová (Ezequiel 24:24). Y juntándose las gentes a él, comenzó a decir: Esta generación mala es: señal busca, mas señal no le será dada, sino la señal de Jonás. Porque como Jonás fue señal a los Ninivitas, así también será el Hijo del hombre a esta generación (Lucas 11:29,30).
El deber del Rey. Entonces él les dijo: Los reyes de las gentes se enseñorean de ellas; y los que sobre ellas tienen potestad, son llamados bienhechores: Mas vosotros, no así: antes el que es mayor entre vosotros, sea como el más mozo; y el que es príncipe, como el que sirve (Lucas 22:25,26). Por lo cual, el reino de los cielos es semejante a un hombre rey, que quiso hacer cuentas con sus siervos (Mateo 18:23).
5. Las leyes, los estatutos y los derechos del Reino de Dios
Asimismo yo confirmaré su reino para siempre, si él se esforzare a poner por obra mis mandamientos y mis juicios, como aqueste día (1 Crónicas 28:7). Que el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia y paz y gozo por el Espíritu Santo (Romanos 14:17). Hablará mi lengua tus dichos; Porque todos tus mandamientos son justicia (Salmos 119:172). Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en virtud (1 Corintios 4:20). Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de justicia, reposo y seguridad para siempre (Isaías 32:17).
6. El Reino de Dios en Israel
Israel es el Arcángel Miguel. Recibió a Israel su siervo, Acordándose de la misericordia (Lucas 1:54). Yo Jehová, Santo vuestro, Criador de Israel, vuestro Rey (Isaías 43:15). Y En aquel tiempo se levantará Miguel, el gran príncipe que está por los hijos de tu pueblo; y será tiempo de angustia, cual nunca fue después que hubo gente hasta entonces: más en aquel tiempo será libertado tu pueblo, todos los que se hallaren escritos en el libro (Daniel 12:1).
El edificará casa a mi nombre, y él me será a mí por hijo, y yo le seré por padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre (1 Crónicas 22:10). Yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre, como hablé a David tu padre, diciendo: No faltará de ti varón en el trono de Israel (1 Reyes 9:5). Por mí es dado mandamiento, que cualquiera que quisiere en mi reino, del pueblo de Israel y de sus sacerdotes y Levitas, ir contigo á Jerusalem, vaya (Esdras 7:13).
7. Las naciones del mundo le servirán y obedecerán a los Santos del Altísimo al final de los días
Después volverán los hijos de Israel, y buscarán á Jehová su Dios, y a David su rey; y temerán á Jehová y a su bondad en el fin de los días (Oseas 3:5).
Después tomarán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo, y hasta el siglo de los siglos. Hasta tanto que vino el Anciano de grande edad, y se dio el juicio a los santos del Altísimo; y vino el tiempo, y los santos poseyeron el reino. Y que el reino, y el señorío, y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo; cuyo reino es reino eterno, y todos los señoríos le servirán y obedecerán (Daniel 7:18,22,27).
¿Quiénes son los Santos?. El ensalzó el cuerno de su pueblo; Alábenle todos sus santos, los hijos de Israel, El pueblo a él cercano, Aleluya (Salmos 148.14).
8. Los Hijos de Israel serán Reyes y Sacerdotes en la Tierra
Y vosotros seréis mi reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel (Éxodo 19:6). Y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra (Apocalipsis 5:10). Y nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios y su Padre; a él sea gloria e imperio para siempre jamás. Amén (Apocalipsis 1:6).
9. La Tierra se gozará con el nuevo Gobernante
¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que publica la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salud, del que dice á Sión: Tu Dios reina! (Isaías 52:7). Alégrense los cielos, y gócese la tierra, Y digan en las naciones: Reina Jehová (1 Crónicas 16:31). Morará el lobo con el cordero, y el tigre con el cabrito se acostará: el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará (Isaías 11:6).
10. El Reino es Jehová
Porque de Jehová es el reino; Y él se enseñoreará de las gentes (Salmos 22:28).
11. El Reino de Dios es para los Pobres
Y alzando él los ojos a sus discípulos, decía: Bienaventurados vosotros los pobres; porque vuestro es el reino de Dios (Lucas 6:20).
12. Los Cuatro Pilares del Reino de Dios
Los cuatro pilares sobre los cuales se levantará el Reino de Dios son: El Rey, la Ley o su constitución, el Pueblo y el Territorio.
· El Rey es Jehová y su Santuario es Ezequiel Jonás Ataucusi Molina;
· La Constitución del Pueblo de Dios, fue aprobada en el año de 1969 en la República del Perú y la cumple su pueblo, los Israelitas del Nuevo Pacto;
· El Pueblo Israelita (Ángeles de Dios) está en el Perú y desde aquí se encuentra expandiéndose por el Mundo entero;
· La Capital del Reino de Dios es el Cuzco, la República del Perú, después serán las Repúblicas que conformaron el Tahuantinsuyo (Ecuador, Colombia, Bolivia, Chile y la Argentina) y posteriormente el Mundo Entero, empero, antes de tomar el mundo, algo que estremecerá a la humanidad y a las grandes potencias va a suceder, de tal manera que, los gobernantes de las grandes naciones de este planeta vendrán a postrarse de rodillas ante el Dios viviente, JEHOVÁ de los Ejércitos.
13. El Rey Jehová mora en Ezequiel Jonás Ataucusi Molina
Ezequiel pues os será por señal; según todas las cosas que él hizo, haréis: en viniendo esto, entonces sabréis que yo soy el Señor Jehová (Ezequiel 24:24). Y juntándose las gentes a él, comenzó a decir: Esta generación mala es: señal busca, más señal no le será dada, sino la señal de Jonás. Porque como Jonás fue señal a los Ninivitas, así también será el Hijo del hombre a esta generación (Lucas 11:29,30). Yo y el Padre una cosa somos (Juan 10:30).
Autor: Ezequiel Ataucusi Gamonal
JEHOVÁ DIOS EN AMÉRICA DEL SUR
EZEQUIEL JONÁS SU TEMPLO
La Paz y la Gracia de
nuestro Señor Ezequiel Jonás Ataucusi Molina, more en cada uno de vosotros hermanos y hermanas Israelitas.
